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Arquitectos: BABIN+RENAUD
- Área: 4185 m²
- Año: 2014
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Fotografías:Cécile Septet
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Ganador del Premio de Arquitectura Pública Contemporánea de Francia, el desarrollo residencial diseñado por Babin+Renaud se encuentra en el casi terminado ecobarrio de Nantes, La Bottière-Chênaie. Rodeado de un proceso abierto, el arborescente paisaje abierto al público, es similar a una isla acogedora y es un buen lugar para vivir.
Se accede desde un centro comercial lleno de plantas flamantes subiendo por unos escalones para llegar a un patio interior elevado. Desde este espacio público compartido hay numerosas vistas de elección, en particular hacia el sur hacia un entorno natural preservado y más allá, hacia la ciudad metropolitana.
El patio está rodeado de cuatro edificios. En el lado sur-este una serie de pasarelas de ancho en dos niveles que dan acceso a las unidades de vivienda, que gozan de amplias terrazas o balcones. En el lado noroeste hay veinte pisos en cuatro niveles que dan a la parte más urbana del nuevo barrio que se puede ver a través de cinco escaleras caladas.
Otros dos edificios verticales en las esquinas noreste y suroeste contienen cada uno una docena de unidades más pequeñas. El primero corre a lo largo de la alameda plantada que contiene un vestíbulo de entrada compartida por todos los residentes y conecta el patio elevado al espacio compartido y un estacionamiento parcialmente sumergido.
51 viviendas unifamiliares en el paisaje urbano de Nantes, Francia. En esta configuración, el desarrollo se caracteriza por la generosidad y la calidad de los espacios comunes, tanto por sus diferentes llegadas a los pisos, pasando por las pasarelas que conectan un edificio a otro, o las escaleras que conducen a las calles, como por el área de estacionamiento con luz natural.
Las persianas, la balaustrada y los pisos están tan meticulosamente diseñados como la arquitectura de los edificios. Blancas, las innumerables grandes ventanales verticales, enmarcadas en metal brillante, sobresalen de las superficies minimalistas de los edificios. De vidrio opalescente, las fachadas de acero inoxidable y concreto, van por el alrededor de la paleta táctil y visual del proyecto, el carácter distintivo por el cual es tan comedido como refinado.
